El sombrero de tres Picos constituye la obra más conocida de Pedro Antonio de Alarcón. El argumento se basa en un doble juego de identidades trocadas y abunda enredos y desenredos.
Ña Frasquita, la guapa molinera, vive feliz con su esposo don Lucas, pero, el corregidor que intenta seducirla, consigue durante una noche mantener alejado a don Lucas, No obstante, al intentar entrar a la casa cae en el sendero que lleva el agua al molino. Empapado logra que la molinera le abra la puerta, pero ella sale a buscar a su marido.
Entonces el corregidor se desnuda y se mete a la cama. Mientras tanto, Lucas llega a la casa, y al ver las ropas del corregidor, cree que lo han engañado y decide vengarse realizando la misma acción.. El molinero llega disfrazado a la casa del corregidor; la esposa de éste descubre el engaño, pero decide darle una lección a su marido.
Ña Frasquita, que no ha encontrado a su esposo, regresa al hogar y encuentra al corregidor y al alguacil, con los que marcha al pueblo. El ama de llaves finge no reconocer al regidor y le dice que su señoría se halla en la cama con su dueña desde hace más de una hora. La farsa continúa, ahora por la propia dueña; pero pronto el equívoco se aclara: la corregidora le ha dado una lección a su esposo y convence a Ña Frasquita de la inocencia del suyo.
Esta obra es una versión Moderna de un romance popular. El molinero de Alarcos, y está realizada en una prosa llena de ironía, malicia y vitalidad. El texto evoca la Andalucía neoclásica, en una trama que toma elementos del sainete. El corregidor y la molinera. Es una narración entretenida que se desenvuelve en un ambiente, una indumentaria y unos tipos dieciochescos, dentro de un estilo adecuado a la misma.